El Estilo Educativo de Don Bosco

La escuela salesiana desarrolla su labor educativa con el espíritu y el método de Don Bosco caracterizado por:

El criterio preventivo, por el cual:

  • hacemos propuestas de experiencias positivas de vida,
  • acompañamos a los alumnos en el desarrollo de actitudes que les permitan superar situaciones difíciles,
  • les ayudamos a valorar el sentido de su juventud y a vivir en plenitud sus aspiraciones, dinamismos e impulsos.

El ambiente educativo, que se caracteriza por:

  • el protagonismo de los destinatarios,
  • el espíritu de familia,
  • la razonabilidad y flexibilidad,
  • el trabajo diario, el esfuerzo concreto,
  • la invitación a la creatividad,
  • el clima de alegría y de fiesta.

La relación educativa personal, que reconoce la individualidad y la historia personal de cada alumno y que se traduce en:

  • familiaridad entre todos los miembros de la CEP,
  • capacidad de acogida y diálogo,
  • confianza y simpatía hacia el mundo de los niños y los jóvenes.

La “presencia-asistencia” animadora de los educadores que:

  • animan sus iniciativas,
  • ofrecen elementos de maduración personal,
  • favorecen experiencias positivas y conductas adecuadas,
  • abren a una visión transcendente de la vida.

La oferta respetuosa de una experiencia de fe, que se caracteriza por:

  • el encuentro con Dios en la vida ordinaria,
  • la celebración de la fe, los sacramentos,
  • la devoción a María Auxiliadora,
  • el sentido de Iglesia,
  • las propuestas de compromiso cristiano: en el cumplimiento del deber, en la proyección solidaria y misionera, en la vida ciudadana.

De este modo, en continuidad con la experiencia pedagógica de Don Bosco, la escuela salesiana se convierte en «familia» cuando el afecto es correspondido y todos, educadores, padres, madres, alumnos y alumnas, se sienten responsables del bien común.

Sus tres pilares…

Razón

1. Acento en la racionalidad. Ya no valen los “porque sí” Hay razones para las cosas y los jóvenes deben conocerlas y racionalizarlas.

2. Valoración de la justicia. Las razones de los demás también deben ser aceptadas.

3. Apoyo a la sensatez. Todo debe ser factible. No deben ponérseles metas inalcanzables. Personalización de la educación.

4. Invitación al esfuerzo y al compromiso

Amor

1. Consejo de Don Bosco: “Procura hacerte Amar,  evita hacerte temer”. El educador salesiano tiene más de voluntario por Amor que de funcionario cumplidor.

2. Si hay preferencia es por quien tiene mayor necesidad. El egoísta tiene dificultades para amar a los demás. El auténtico objeto del Amor es el otro.

4. Los jóvenes no sólo deben ser amados, sino que deben saber que son amados. El auténtico amor inspira la confianza.

Religión

1. Tener en cuenta el contexto. Hoy el contexto ha cambiado.

2. Entre religión y práctica religiosa hay diferencias. Las prácticas religiosas es un instrumento.

3. Importancia de la instrucción religiosa.

4. No podemos concebir la religión como se concibió en aquellos tiempo.