En tiempos en los que el reguetón y subgéneros semejantes monopolizan el panorama musical de los más jóvenes, proponer que todo un colegio asista a un concierto de polifonías, canciones populares rusas y música litúrgica ortodoxa roza, cuando menos, lo atrevido. Y conseguir que unos seiscientos alumnos de entre 8 y 16 años participen en el mismo en clima de silencio y respeto, ya es inaudito.

El coro franco-ruso «De este a oeste», dirigido por Vladimir Gomba, ha ofrecido este espectáculo a los alumnos del colegio salesiano en la mañana del 25 de octubre, aprovechando su paso por la isla de Gran Canaria, donde están ofreciendo un ciclo de conciertos. En el repertorio se contaban hasta seis títulos de canto litúrgico ortodoxo, bien de la misa oriental, bien de otras fuentes religiosas. Asimismo, en un segundo bloque, la coral ha interpretado dos piezas de Dmítriy Bortiánskiy, compositor ucraniano del siglo XVIII y XIX fuertemente marcado por su formación italiana. El concierto ha concluido con tres piezas de folklore letón y ruso.

La presentadora, Irina Yanysheva, traduciendo las palabras del director de la coral, ha remarcado el hecho de que «estamos en un mundo global y es una tarea principal de la escuela formar para el conocimiento y el respeto de las otras culturas con las que entramos en contacto».

Ya en privado y antes de despedirse, el coro franco-ruso ha querido honrar a la Virgen María en la parroquia de Santa Catalina de Alejandría, interpretando un Aleluya polifónico que ha hecho las delicias de los que han podido disfrutarlo.